La achicoria es una planta conocida con multitud de nombres diferentes en función de la comarca, como por ejemplo diente de león, matacandil, matacandelas, lechuguilla, amargón, lucecitas, taraxacón, muelas de vieja o achicoria de burro. Originaria de las zonas temperadas de Eurasia, se ha convertido en una especie común en toda Europa y muy apreciada culinariamente. Es resistente y crece en los márgenes de los caminos y los bosques, así como en prados, tierras yermas y campos.
En Andorra y las comarcas vecinas del Pirineo catalán, se recoge básicamente para hacer ensaladas. Es el plato típico de la parroquia de Canillo, aunque la podrás degustar en restaurantes y bordas tradicionales de toda nuestra geografía.
Con la primavera, cuando se funden las nieves y empiezan a aparecer las primeras plantas, es el momento ideal para recoger la achicoria. De hecho, aunque en nuestro territorio no se dé el caso, la planta entera es comestible. Las raíces, que son amargas, se pueden comer crudas o hervidas, de aperitivo o acompañamiento. En los países eslavos, los capullos se comen y se conservan en vinagre; o en sal, como en Sicilia. Y en Occitania se fríen con aceite de oliva para hacer tortilla. Las flores (margaritas amarillas, que aquí llamamos diente de león), por su parte, son la base de diferentes licores, en varias zonas agrícolas europeas.
Además de ser comestible y como no podía ser de otro modo tratándose de una planta, la achicoria también tiene propiedades terapéuticas y se ha usado como planta medicinal desde la antigüedad. En este ámbito es más conocida como diente de león. Baja en grasas, proteínas y calorías, aporta vitaminas como la provitamina A, vitamina B1, B2, C y E; además de sales minerales como calcio, sodio, potasio, fósforo, magnesio y hierro, entre otras.
Como curiosidad, añadiremos que la ensalada de achicoria amarga, plato tradicional de nuestra gastronomía, cuenta con un sello propio. En mayo de 2019, el servicio de emisiones de Correos de España lanzó una serie nueva llamada "Menges d'Andorra" con dos sellos, uno de los cuales estaba dedicado a la ensalada de achicoria, con un valor nominal de 1,40 €. El otro es de la Escudella, de 1,50 €.